Diagnóstico imagen
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Ecografía veterinaria
Es una prueba de diagnóstico por imagen no invasiva que utiliza ultrasonidos para producir imágenes de los órganos, estructuras y tejidos internos a tiempo real.
A diferencia de la radiografía, la ecografía es inocua, ya que no emite radiación, y es de gran utilidad para valorar tejidos blandos en movimiento como el sistema urogenital, sistema digestivo, glándulas endocrinas (tiroides, glándulas suprarrenales, etc.), corazón, músculos y tendones.
La ecografía, además, nos permite realizar el diagnóstico de embarazo en hembras gestantes de forma temprana, así como guiar en procedimientos como la toma de muestras (cistocentesis, biopsias).
Radiografía veterinaria
Es una prueba de diagnóstico por imagen en la que se emite un haz de rayos x que incide sobre el paciente para obtener una imagen estática de diferentes estructuras del cuerpo de nuestros perros y gatos.
La radiografía nos permite evaluar los tejidos blandos, cavidades, huesos y articulaciones de perros y gatos, de forma que podemos localizar diferentes lesiones estructurales como fracturas y alteraciones osteoarticulares en general, patologías cardiopulmonares, acúmulo de líquido en cavidad torácica y abdominal, cálculos urinarios, cuerpos extraños y masas, etc.
La radiografía es una técnica sencilla y segura que, generalmente, no requiere de una gran preparación de los pacientes caninos o felinos, y puede aportar gran valor diagnóstico.
TAC veterinario
La tomografía axial computarizada es una técnica avanzada de diagnóstico por imagen que emite rayos x para obtener imágenes detalladas de diferentes secciones anatómicas.
A diferencia de la radiografía, el TAC en perros y gatos obtiene múltiples imágenes de una sola zona mediante su movimiento circular, permitiendo explorar áreas como el abdomen, tórax, cráneo, esqueleto en general, articulaciones, etc.
Para realizarla es necesario que perros y gatos se encuentre bajo sedación, por lo que es recomendable realizar un estudio hematológico previo y deben estar en ayunas.
Esta técnica de radiodiagnóstico es un complemento a las técnicas radiológicas convencionales cuando estas no son suficientes para obtener un diagnóstico. Por este motivo, en caso de necesitar su realización, tu veterinario te ofrecerá toda la información disponible llegado el momento.
Resonancia Magnética veterinaria
Es una técnica de diagnóstico por imagen no invasiva que se emplea en veterinaria para explorar, detectar y tipificar lesiones y diagnosticar múltiples enfermedades en todo el cuerpo de perros, gatos y otros animales.
La principal indicación de la RM en veterinaria es el diagnóstico de enfermedades que afectan al sistema nervioso central (médula espinal y encéfalo) cuando otras técnicas radiológicas se encuentran limitadas. Sin embargo, también se emplean para realizar diagnósticos de otras patologías como enfermedades ortopédicas o cardiacas.
A diferencia de otras técnicas como radiografía y el TAC, la resonancia magnética utiliza ondas de radio en un campo magnético para obtener las imágenes de alta definición.
Se trata de una técnica costosa que se realiza bajo sedación profunda o anestesia por la que el paciente deberá estar en ayunas y dispones de un estudio hematológico previo que determina si es apto para esta prueba.
Ecocardiografía veterinaria
De manera idéntica a la ecografía, la ecocardiografía veterinaria consiste en el estudio de las diferentes estructuras cardiacas y la medición de los flujos del corazón mediante la emisión de ultrasonidos.
Se trata de una herramienta de gran utilidad frente a la sospecha de enfermedades cardiacas tanto congénitas como adquiridas de perros y gatos.
Existen diferentes modalidades de ecocardiografía (ecocardiografía bidimensional, Doppler), mediante las que el veterinario puede evaluar la anatomía, morfología, fisiología y hemodinámica del corazón.
De esta forma se puede determinar si existen diversas patologías cardíacas como miocardiopatía hipertrófica (común en razas felinas como el Sphinx o Main Coon), cardiomiopatías dilatadas (Bóxer, Doberman, Cocker), insuficiencia cardiaca, soplos, malformaciones, valvulopatías, derrames pericárdicos o neoplasias en perros, gatos y otros animales.
En general, el ecocardiograma no requiere de ningún tipo de preparación previa del animal, salvo excepciones en la que no hay una cooperación suficiente para realizar la exploración. Únicamente, será imprescindible rasurar la zona a explorar y mantener una posición fija, normalmente en decúbito lateral.
Si tu perro o gato presentan síntomas de tipo cardiorrespiratorio como dificultad respiratoria, intolerancia al ejercicio, tos, apatía, cianosis o síncopes, no dudes en acudir a tu veterinario a que le realice un chequeo cardiológico.
Electrocardiograma
Es una técnica complementaria fundamental en el marco de la cardiología veterinaria, usualmente empleada para evaluar las enfermedades cardiacas relacionadas con la actividad eléctrica del corazón.
La realización de un electrocardiograma está indicada cuando el veterinario sospecha, tras una consulta previa, de algún tipo de alteración relacionada con el ritmo o la frecuencia cardíaca.
Un electrocardiograma, es una prueba fiable, económica y sin riesgo que normalmente se realiza sin la necesidad de una preparación previa (ayuno y sedación), y en una habitación tranquila.
Las patologías cardiacas en nuestras mascotas casi siempre deben ser tratadas para frenar su evolución. Por este motivo, si crees que tu gato o tu perro pueden estar sufriendo alguna patología cardiaca, no dudes en acudir un veterinario especialista en cardiología para que pueda evaluarlo de forma temprana y adecuada.